lunes, 8 de diciembre de 2014

¿El hincha sabe de fútbol?

Que el Huevo Rondina haya ascendido al humilde Villa Dálmine a la B Nacional en una increíble final al candidato Tristán Suárez de Caruso Lombardi no pasó desapercibido por Villa Crespo. No sólo por el pasado bohemio de Rondina -como jugador y más reciente como entrenador- sino porque su nombre había estado rondando en las cabezas de los dirigentes como un firme candidato a ser el DT de Atlanta en 2015.
El Huevo tomó la dirección técnica bohemia en 2012, cuando el equipo prácticamente ya estaba descendido a la B Metropolitana. Se quedó y afrontó el desafío de volver a la segunda categoría. No empezó bien pero luego armó un buen equipo que, sin un juego vistoso, se hizo de la punta por un buen número de fechas. Sin embargo, Atlanta se cayó, entró en un profundo bajón futbolístico y se fue muy pronto en el Reducido por el segundo ascenso. Rondina fue muy criticado a lo largo del torneo, acusado de mezquino, incluso cuando el equipo ganaba y punteaba. 
Parecía raro que, un par de años después, el nombre de Rondina volviera a sonar fuertmente para el cargo. Los dirigentes habrán querido recuperar a un DT laburador, frontal, conocedor de la categoría, después de las malas experiencias de Méndez y Mayor en lo humano, y del error de haber traído a un novato como Capria. Rápidamente, muchos hinchas hicieron notar su bronca por la posibilidad de la vuelta de Rondina. Quizá la CD no quiso arriesgar contratando a un técnico que ya de entrada tenía tanto rechazo, y desistió de la idea. De todos modos, con este ascenso de Villa Dálmine, seguramente tampoco hubiera sido posible la vuelta de Rondina de haberlo querido.
El hincha, generalizando impunemente, nuevamente se equivocó. Como se equivoca casi siempre. El que pide que entre un jugador y después no hace nada. El que pide que reemplacen a alguno y hace el gol. ¿Cuántas veces habrá pasado que alguno putea por cómo le pegó un jugador a la pelota y el remate termina en gol o en una magnífica habilitación? Lo mismo que se escucha en la cancha se lee en las redes sociales.
El hincha es algo abstracto. Hinchas somos todos, vos, yo, los dirigentes también lo son. El fútbol no es una ciencia exacta, no es posible predecirlo ni dominarlo. Quizá solamente si admitimos todos cuán poco sabemos de fútbol, podamos bajar del pedestal de la soberbia y buscar cuál es el mejor camino para que Atlanta logre lo que todos deseamos: el pronto ascenso al Nacional. Todos debemos hacernos cargo desde nuestro lugar, socios o dirigentes.