Sentimiento Bohemio puso el primer ladrillo, y acogió además en su Libro de Visitas una especie de incubadora en donde creció el germen siome. La creatividad volaba por los aires en ese gran brainstorm orgiástico siomeril y lo que surgió como un insulto terminó convirtiéndose en un motivo de extraño orgullo, en una cuestión de identidad: el siomerío. Nació La Taberna del Siome en su máximo esplendor, en un momento muy particular en la historia de Atlanta, ya que se trataba del peor momento futbolístico vivido jamás. Después de descender del Nacional B y de fracasar con el Dream Team, el Bohemio se encontraba prácticamente descendido a la Primera C al comenzar la temporada 2002/03, época del apogeo siome y nacimiento de esta página. Ese año se sufría cada minuto de partido, propio o ajeno. Era una angustia constante, pero eso no impidió que la situación pudiera ser tomada con humor sino todo lo contrario.
Lo importante es que Sentimiento Bohemio nos deja no solamente un modelo de periodismo partidario de calidad, serio y comprometido, sino que también nos enseña la importancia del humor como herramienta de supervivencia y superación de problemas. Al fin y al cabo, por mucho que queramos a Atlanta, por mucho que nos amarguemos en cada derrota, debemos entender que el fútbol no es más que un juego. Y es un mensaje muy relevante en tiempos de dramatismo y violencia.
Andá a saber si Sentimiento Bohemio estará orgulloso de su hijo, La Taberna. Un hijo medio atorrante, que nunca estudió ni laburó, que siempre vivió de arriba. Jodanse, ahora que somos el Decano de los medios partidarios no nos para nadie. Hasta capaz actualizamos seguido y comentamos los partidos, quién te dice.
No hay comentarios:
Publicar un comentario